Hace un par de semanas Apple y Google firmaban una paz en la guerra de las patentes. Sin embargo, la guerra filosófica entre ambos gigantes no ha terminado aún. La inclusión de la posibilidad de incluir DuckDuckGo como buscador por defecto en Safari, tanto en iOS 8 como en OS X 10.10, así lo demuestra.

Apple y Google representan dos filosofías bien distintas, de eso no cabe duda. Es tan sencillo como remontarse a sus orígenes o detenerse en cuál es su modus vivendi.

En la keynote inaugural de la WWDC de ayer, Apple sorprendió a propios y extraños con su nueva política hacia los desarrolladores y con la introducción, nada más y nada menos, de un nuevo lenguaje de programación para iOS y OS X.

Hubo muchos cambios a sus dos grandes sistemas operativos, de mayor o menor calado, pero en la diapositiva de “cambios que no tenemos tiempo para mencionar” de iOS 8, hay uno que para mí es fundamental.

Y ese es el hecho de que DuckDuckGo forme parte de las opciones a elegir como buscador por defecto en Safari.

Para los que no lo conozcáis, DuckDuckGo en un buscador web que nos ofrece una potencia similar al todopoderoso Google pero con la ventaja de sin recoger ningún tipo de información sobre nosotros y sin inundarnos de anuncions o spam.

Personalmente, llevo utilizando desde un mes o así, y no puedo estar más contento con él. De hecho ha sustituido a Google como pantalla de inicio de Safari.

Es cierto que otros de los los nuevos cambios que introducirá Apple en Safari, la navegación privada por pestañas, ya lo ofrecía Chrome desde hace tiempo1, pero si lo sumamos a la introducción de DuckDuckGo, podemos ver cómo Apple está realmente preocupada por la privacidad de sus usuarios.

Me reafirmo en mi tesis inicial, tal vez la guerra termonuclear que invocó Steve Jobs esté en stand-by, pero la guerra filosófica que surge de las diferentes visiones y valores de ambas compañías sigue con las espadas en todo lo alto.

  1. Algo que no deja de ser una pantomima por parte de una empresa que se gana la vida recolectando nuestros datos y vendiéndoselos al mejor postor.