De cómo Federico Viticci pone a prueba el cargador de 29W de Apple ensayando con su iPad Pro de 12,9” y de la jugarreta de turno de los de la manzana mordida.

Podría intuir los motivos de Apple para vender el adaptador de corriente de 29W como un accesorio aparte (algunos argumentarán que la carga rápida para el iPad Pro aún no estaba lista el año pasado). Sin embargo, en un mundo perfecto, el adaptador de corriente de 29W y el cable USB-C a Lightning deberían ir en la caja del iPad Pro de 12,9 pulgadas.

Federico Viticci, fundador y editor jefe de MacStories

Una lectura fascinante y más que recomendable como no podía ser menos trátandose del señor Viticci. A estas alturas de la película no vamos a descubrir la calidad que destilan todos y cada uno de sus artículos, como tampoco nos debería extrañar que precisamente él, alguien que hace varios años que desterró su MacBook Air para pasar a confiar en su iPad como dispositivo de trabajo principal, sea el autor de tan detallado ensayo.

Sin embargo, y como reciente usuario de un iPad Pro de 12,9 pulgadas, no puedo dejar de sentirme algo frustrado por el hecho de que Apple haya decidido, justo ahora, hacer público que el cargador objeto de los ensayos de Viticci, que acompañaba originalmente a los MacBooks del 2015, permite la carga rápida de nuestros potentes iPads Pro de 2015 1. Entonces, la pregunta que todos nos hacemos es ¿por qué Apple nos da cargadores de 12W, los mismos que vienen con los iPhones y resto de la gama iPad, en vez de los de 29W?.

En un mundo perfecto, en vez de pedirnos que nos gastemos otros 95 € (cargador y cable nuevos), Apple no sólo empezaría a adjuntar los mencionados accesorios desde ya con los iPads Pro de mayor tamaño, sino que a la vez, ya puestos a soñar, pondría en marcha un programa de reemplazo gratuito para los usuarios de dicho iCacharro.

A veces estos tics de los de Cupertino me hacen entender por qué mucha gente aún sigue viendo a Apple como una empresa de sacacuartos.

Así no Apple, así no…